SEREMOS COMO EL CHE!!!!

Con la incorporación del Che a la revolución cubana, y teniendo como antecedente todo un ciclo anterior de propósitos y decisiones asumidas, emerge el revolucionario consecuente, que avanza a la par con el proceso, del que intrínsicamente forma parte, y que tanto le aporta a su futura estrategia revolucionaria continental.

La coherencia y organicidad es tal que desde la propia lucha vislumbra el advenimiento de la nueva sociedad y sobre todo del nuevo hombre que surge y  transforma el ritmo de los cambios profundos que se plantea todo proceso, que en verdad se propone transformar radicalmente las normas sociales vigentes y propiciar una verdadera participación de las grandes mayorías populares.

El proyecto político revolucionario del pueblo Cubano, como expresión del desarrollo de las revoluciones de liberación nacional, anticapitalista y antiimperialista reasume y reelaborar el marxismo -  leninismo a través de su vanguardia político – militar y dentro de ella, Guevara sobresale no solo por su entrega, ejemplo y valor revolucionario, elementos que por si mismos valdrían para situarlo en una posición privilegiada, sino porque combina a partir de su practica política concreta, el papel previsor de la teoría revolucionaria ante la acción creadora del socialismo  y una praxis política consecuente con el proyecto que se estaba llevando a cabo en Cuba y el continente.

Su practica revolucionaria a partir y desde la revolución define el socialismo como la alternativa valida para le desarrollo pleno de la humanidad, y el marxismo -  leninismo como la única teoría de hacer avanzar ese proyecto, comprende claramente las dificultades del “socialismo real”, consecuencias de políticas erradas expresión del determinismo ajeno al marxismo creador.

Por el socialismo se centra su entrega sin límites a una experiencia revolucionaria, que considera genuina y que le propiciaba los componentes fundamentales para repensar una teoría de la transición socialista y definir la nueva sociedad son clases.

Por ultimo y ante las dificultades del “socialismo real” y la experiencia que como proyecto le proporciona la revolución cubana, dentro de sus aportes mas originales se encuentra como el mismo lo define la tarea de pensar el socialismo desde el tercer mundo, y en esta línea argumentativa estructura sus tesis tercermundistas, que contribuirán al orden existente, al hacer énfasis en las caracterización del antagonista principal y las nuevas formas que propiciarían el cambio, única forma de alcanzar la plena independencia política, social, económica militar y cultural y el despliegue al máximo de las capacidades del ser humano liberado.